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¿Conoces el reglamento de descarga de aguas residuales de Guatemala?

13,Ago,21 | Regulación y Seguridad

¡En 4 pasos te explicamos cómo iniciar el monitoreo de la calidad de tus aguas residuales!

 

En Guatemala existe un reglamento vigente desde el año 2006 para el cumplimiento de las descargas residuales de los diferentes tipos de entes generadores (personas, instituciones o comercios) que utilicen agua en cualquier etapa de su operación y posteriormente la descarguen con una calidad alterada.

 

El documento conocido como “Reglamento de las Descargas y Reúso de Aguas Residuales y la Disposición de Lodos” está compuesto por varios artículos que unifican criterios y límites adecuados para el mejoramiento del sistema hídrico en el país.

 

Es muy importante conocer el tipo de descargas para identificar cuáles artículos y consideraciones estipuladas en el reglamento son aplicables para tu descarga. Para ello aquí te damos una guía rápida de cómo aplicarlo en los monitoreos rutinarios de tus sistemas y redes de drenajes.

 

Por lo anterior, ten en cuenta que la calidad del aire también es un factor importante. El sumar esfuerzos para prevenir o eliminar malos olores en las instalaciones de un restaurante genera resultados positivos:

 

Paso 1: ¿qué tipo de ente generador eres?

     

    Identificar tus tipos de aguas es fundamental, no solo para el dimensionamiento correcto de tu sistema de tratamiento y su operación sino para saber bajo qué normativa están controladas tus descargas. Para eso es indispensable que sigas el siguiente procedimiento:

     

    • Caracterización inicial de aguas residuales:

    La caracterización inicial es una foto general del estado de nuestras descargas, es un documento de uso interno del ente generador que sirve para conocer el tamaño del impacto generado. Es indispensable que este primer análisis sea totalmente transparente e inclusivo con todos los tipos de descargas que se produzcan.

     

    • Para la caracterización inicial de aguas residuales necesitas:

    Identificar un punto de toma de muestra. Punto que, quedará registrado con coordenadas geográficas precisas para repetirlo de manera rutinaria. Idealmente, este punto de toma debe estar dentro de una caja de registro que evite cualquier contaminante exterior identificado gráficamente. Es importante que cuente con un alto flujo de agua y que no retenga agua estancada, pues podría acumular la contaminación.

     

    • Estudio técnico de aguas residuales:

    Una vez realizada la primera caracterización de las aguas, el reglamento requiere de la creación de un Estudio Técnico de Aguas Residuales (ETAR). Este documento validado y firmado por un profesional sanitario, describe a detalle el tipo de aguas generadas, las características del sistema de tratamiento existente y en caso de ser necesarias, medidas de mitigación implementables en un lapso definido para alcanzar los criterios establecidos en la normativa.

     

    El estudio técnico, más que un requisito, es una herramienta de alta utilidad para los entes generadores, pues en éste se estipulan las condiciones, bases y artículos aplicables para su monitoreo, asegurando que los resultados se interpreten técnica y homogéneamente, sin importar la entidad supervisora o el inspector aleatorio que solicite la documentación.

     

    Dentro del estudio técnico se identifica también, qué tipo de ente generador es la persona de interés según las siguientes características:

     

    • Edad del proyecto:

      El reglamento hace énfasis en dos tipos de generadores según el tiempo existencial, diferenciando a todos los entes generadores previos a la creación de éste (anteriores al 2006) y a los nuevos posterior a su publicación (después al 2006).

     

    • Tipo de descargas:

      Dentro de las aguas generadas existen un sinfín de clasificaciones según su uso, nivel de carga contaminante o incluso cantidad de agua descargada.

     

    El reglamento separa a los entes generadores en dos grupos: aguas ordinarias (generalmente domésticas y de uso sanitario) y aguas especiales (que pueden ser de industrias, centros comerciales, agricultura, entre otras).

     

    • Cuerpo receptor: clasifica al proyecto según la dirección de sus aguas residuales. Dentro de los cuerpos receptores más comunes destacamos: alcantarillados públicos, esteros, ríos, lagos, pozos, áreas de conservación, entre otros. A cada uno aplica a una normativa diferente.

     

    • Reúso: una forma de clarificar al ente generador es según el aprovechamiento de sus aguas residuales, generalmente estos son proyectos agrícolas o urbanizaciones y al igual que el resto de los generadores, se les aplica una estricta normativa para la disposición de sus descargas.

     

    Paso 2: muestreo de tu salida de aguas residuales

    El muestreo o procedimiento de toma de muestra, es posiblemente el factor más importante a considerar en la caracterización de las aguas residuales y en el monitoreo periódico de las mismas. Una mala toma de muestra puede perjudicar los resultados considerablemente, sin importar la calidad y operación del sistema de tratamiento.

     

    Criterios importantes para considerar en una toma de muestra:

     

    • Punto de toma de muestra: como se mencionó anteriormente, el punto de toma de muestra debe contar con las siguientes características:

     

      1. Flujo continuo de agua sin estancamiento.
      2. Caja de registro protectora de contaminación externa.
      3. Vertedero o medidor de caudal.
      4. Identificación gráfica del punto.

     

    • Duración de toma de muestra: según la duración de muestra puede considerarse como muestra puntual o compuesta. La compuesta puede abarcar un período de tiempo ilimitado y refleja cualquier oscilación en la producción de aguas residuales, siendo ésta la más confiable y representativa.

     

    • Envases: dentro de la batería de análisis de interés, los compuestos evaluados pueden reaccionar con ciertos materiales comunes en los envases de transporte. Para esto los protocolos de toma de muestra sugieren el uso de envases desechables específicos para cada parámetro a evaluar. Comúnmente se usan vidrio, bolsas estériles, plástico de alta densidad u otros materiales inertes.

     

    • Cadena de custodia: la cadena de custodia comienza desde que se identifica el frasco donde se tomó la muestra. Es de suma importancia para evitar la mezcla o confusión de muestras si se incluyen varios puntos. También asegura el correcto manejo de la muestra desde su toma hasta el análisis, el cual se hace varios días después.

     

    Paso 3: Parámetros más comunes a monitorear

     

    La normativa mencionada solicita el análisis de 3 grandes grupos de parámetros de interés, siendo fisicoquímicos, microbiológicos y metales pesados.

    • Fisicoquímicos: es una serie de características del agua que puede ser alterada durante su uso, entre ellas las comúnmente medidas son:
    1. Carga orgánica diaria.
    2. Demanda Bioquímica de Oxígeno por litro de agua.
    3. Concentración de grasas y aceites.
    4. Concentración de nutrientes en el agua.
    5. Sólidos suspendidos.
    6. Sólidos.
    7. Color real y color aparente.

     

    • Microbiológico: analiza la concentración de microorganismos patógenos presentes en el agua. Se miden principalmente coliformes fecales, a menos que se solicite algún otro tipo.

     

    • Metales Pesados: generalmente se monitorean los más nocivos para el humano y el medio natural entre estos mencionamos:
    1.  Plomo
    2.  Cadmio
    3.  Arsénico.
    4.  Cobre
    5.  Mercurio
    6.  Cromo
    7.  Zinc
    8.  Cianuro

     

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    ¡Mejorar la calidad del agua residual es tarea de todos, vamos por un mundo más verde!

     

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